domingo, 2 de noviembre de 2008

EL HOMBRE Y LA TIERRA

Del burgalés Félix R.de la Fuente,fue una excelente ventana para ver la fauna tan diversa que convive con nosotros en este planeta llamado Tierra.
Pero así, desde la ventana, es como quiero yo admirar los comportamientos y las estéticas animales.
Mis experiencias con alguno de ellos, no han sido muy agradables.
Eso sí,todo lo que tuvieron de traumáticas en su momento, lo tienen de cómicas ahora, al recordarlas.

En Cuba un baño con delfines.
Aunque iba con cariño, salí despavorida.
Los míos, los que me tenían que agasajar,fueron unos cafres que se me echaron literalmente encima, uno por cada lado y otro en la cabeza con aguadilla incluida.
Entre que tragué agua sucia, que me acorralaron y que me chillaban al oído ruidos extraños...decidí que mi cama redonda con delfines fuese definitivamente la última.


En el zoo de Santillana del Mar, Santander. Setiembre de 1979.
No sé porqué en un momento del paseo por aquel recinto, mis ojos se clavaron en la rama de un árbol.
Allí estaba , medio camuflado y casi pétreo, aquel pajarraco negro.
- Nacho, ese pájaro me está mirando...
- Ja ja ja, venga ¡ por Dios!, que te va a mirar.
-Te digo que me esta mirando...
-Anda,anda, vamos, pasa.
-Nooo, que me mira mal...
Casi a la fuerza reanudé el paso, siempre mirando de reojo a aquélla rama.
De pronto, un terrible graznido, un despegue y un picado camicace llevó al diabólico animal a golpear mi brazo
Pero si su graznido me pareció tremendo a mí, no se qué le habrá parecido a él mi aullido de coyote y el girar de las aspas de mi molino en un día de viento huracanado...
¡Por cierto! en mi quinto mes de embarazo, mi hijo casi fue cántabro.
Y vamos para atrás.
Infancia y adolescencia.



Creo que odiaba las navidades por lo que estas me traían en consecuencia :
CENTOLLOS PATALEANTES por el fogón de la cocina.
Enormes arañas de mar zapateaban por mi terreno ofreciéndome sangrientos abrazos con aquellas patas elevadas y las pinzas
amenazantemente abiertas.
Me perseguían por toda la casa. O, como dicen por aquí, me "escorrían".
No, no estoy loca, no.
Venían al galope pasillo arriba y abajo precedidos siempre , eso si , del brazo de mi padre que se moría de risa,
carcajada va, carcajada viene oyendo mis alaridos al sentir yo , aquel aliento salado en mi nuca.
El problema añadido estaba en que después de cocidos, se me sometía a la misma prueba. El resultado no variaba ni un ápice,
2 x 1. No he vuelto a comer centollo,creo.

Más atrás todavía.
Veranos en Burgos. ¡¡ Horror !! Cangrejos de río, Ay Ay.
Era una divertida afición ir a pescarlos a los ríos, con el retel y la carnaza y luego, in situ, la paellita campestre de cangrejo.
Un manjar los bichitos,pero eran rebeldes y agresivos. También tenían la fea costumbre de ponerse de pié y tocar la castañuela
para que no te acercases...
La joven y ágil (menos mal) Juncal, corrió muy veloz por aquellos campos, huyendo de dos brazos armados con vivos caparazones
verdes.
Y podría seguir y seguir contando sobresaltos con desagradables y crujientes bichos negros de cuyo nombre no quiero acordarme...
Y con caprichosos perritos que se cruzaron de acera para clavarme el colmillo y felices de ver cumplido su deseo, volvieron a la acera, de la que nunca debieron haber salido....

Eso sí. Estoy muuuuy contenta. Todavía una avispa no me picó.


Ja ja. Besos a todos...

Guau. Juncal.

5 comentarios:

Nacho dijo...

Todo tiene su explicación biologica.

Delfines: No es de extrañar ( si eran machos ) que se te avalanzaran, llevo yo años haciendolo, aunque "racional", soy animal.

Pajarraco: Creo recordar que ibamos comiendo un polo helado.
¿ No será que tenia hambre el avecilla y queria comer?
¿Refrescarse?.Hacia calor.

La naturaleza es sabia y los "racionales" podemos controlar nuestros instintos basicos.
Los "irracionales" no.
Van como el ÑU.

Centollos y cangrejos de rio es otra historia.
Era de broma, pero siempre habeis sido un poco morbosillos con las bromas.

Creo que te ha salido muy salado.

Un beso y un abrazo.

¿Un chapuzón?

Jose Manuel Ruiz dijo...

"desagradables y crujientes bichos negros de cuyo nombre no quiero acordarme...

¿Pero que animalitos serán esos?
No sé, no sé. Me quedo con la duda ;-)

Da cosa lo del pajarraco negro, a pesar de que ya me lo habías contado. ¡Vaya susto! Ya te imaginaba como Tippi Hedren en la peli de Hitchcock.
En fin quizás te animes algún día con un post sobre tus experiencias digamos "paranormales".

Un video de depedida:

Mariachi

À bientôt

Juncal dijo...

Racional o irracional...pss...
en según que temas no los distingo.
Cuando "Dios creó al hombre"
se le despistó hacer una desconexión en alguna terminación nerviosa.¿En quién estaría pensando para semejante despiste?
Y respecto al humor morboso,
tienes razón...y yo la primera.
Todavía me río al acordarme de la época mía con las montañas rusas.
Lo que disfruté invitando a mis amigas a probarla.
Eso sí , de una en una.No quería que se viesen amparadas unas con otras.
Que placer mas divertido era
ver a Susana,por ejemplo,
abrir la bocona y emitir unos sonidos varoniles, tipo exorcista.
y ladear la cara, mirarla y verla con los ojos saliendose de las órbitas y
comprobar que en lugar de un rostro , había solo dientes...
Y así una por una pasaron por el aro y yo haciéndome pis de risa.
Que tiempos...
Pero me quieren , seguro.
De manera que, como dónde las dan las toman...alguna vez tenía que admitir que me tocase a mí.
No pasa nada.
Estoy aqui.
Gracias Ñacho.
Juncal.

Juncal dijo...

Experiencias paranormales,Jose ??
Pues como no sean en el Kiosco por la mañana....No se.

A mí cualquier ruido me hiela la sangre,si estoy sola.
Alguna cosilla rara, tan solo.
Ya me dirás qué te la heló a tí, de las cosas que te he contado.
Serían casualidades No?

Gracias.Juncal.

Agustín Crespo dijo...

Aunque suene muy antiecologista, los peces , aves y demás seres que configuran nuestra fauna , Nacho, los prefiero en la mesa, bien fritos o cocidos, así no dan problemas. También en un zoologico resultan interesantes; salirse de estos parámetros resulta peligroso. Un abrazo.